Si te has propuesto adelgazar y has comenzado a reducir la ingesta de carbohidratos en tu dieta diaria, es más que probable que al principio te cueste trabajo decidir qué comer cada día. Curiosamente, el nutriente que con más facilidad nos hace engordar, que es el carbohidrato, es precisamente el que tenemos en la base de nuestra alimentación, por lo que cuando decidimos reducir su consumo para poder adelgazar, es normal que nos cueste trabajo encontrar alimentos libres de carbohidratos porque estamos más que acostumbrados a comer hidratos de carbono todos los días a todas las horas. Precisamente por ese motivo, muchas personas tienen problemas para configurar sus menús los primeros días hasta que le pillan un poco el truco a la lista de la compra.
Cuando nos disponemos a adelgazar, probablemente uno de nuestros mejores aliados es el pescado, especialmente el pescado fresco. La suerte que tenemos si queremos adelgazar y vivimos en España es que la mayoría de nuestras ciudades disponen de buen abastecimiento de pescado, algo que no es de extrañar teniendo en cuenta que somos un país bañado por el mar al norte, al este y al sur, y que incluso al Oeste tenemos las lonjas de Portugal que abastecen a buena parte las poblaciones limítrofes por ese lado.
El pescado fresco es idóneo para adelgazar por varios motivos. Para empezar -y como es lógico-, está libre de carbohidratos. En segundo lugar, su componente principal es la proteína de alta calidad y magnífico valor biológico, algo imprescindible para perder peso sin sufrir una merma en nuestra masa muscular. En tercer lugar, muchas especies de pescado contienen además grasas de altísima calidad que son igualmente imprescindibles para mantenernos sanos mientras adelgazamos. Aunque estemos más que acostumbrados a leer y escuchar que es importante no ingerir grasa para adelgazar, si has leído cualquiera de mis libros ya sabes que esto no es exactamente así. La grasa, en grandes cantidades, nos impedirá adelgazar e incluso nos hará engordar, pero resulta que los carbohidratos y la proteína pueden potencialmente causar el mismo efecto. Como en muchas cosas en la vida, la virtud de la ingesta de grasa está en su justa medida.
Además de los dos macronutrientes que componen el pescado, las proteínas y las grasas, los pescados y mariscos en general son además ricos en micronutrientes, algo que hace de ellos una elección todavía mejor para adelgazar, porque nos aseguramos un gran aporte de elementos que son imprescindibles para el buen funcionamiento de nuestro cuerpo. Muchas personas opinan que para adelgazar es suficiente con cerrar la boca, pero lo cierto es que esto puede ser medianamente efectivo únicamente para perder peso, que no es lo mismo que adelgazar, que significa perder grasa.
Aunque lo idóneo para adelgazar es consumir pescado fresco, muchas de las propiedades del pescado se mantienen prácticamente inalteradas si lo consumimos congelado o en conserva. Personalmente no tengo tiempo de ir al mercado a diario, pero es fácil verme en el mercado central de Atarazanas de Málaga los sábados a primera hora. Normalmente compro pescado para toda la semana o incluso para dos semanas. Una parte de ese pescado va a la nevera y otra parte va al congelador durante unos días. Esto nos permite ir consumiendo pescado durante toda la semana, cocinándolo prácticamente de todas las formas posibles y consumiéndolo como más me gusta personalmente, que es crudo. Lógicamente, no consumo cualquier pescado crudo y la mayoría de ellos los congelo previamente, así que si no tienes costumbre de consumir pescado crudo, antes de intentarlo debes asesorarte un poco acerca del anisakis y otros parásitos que pueden estar presentes en ciertas especies. En este artículo del blog del libro Cocinar sin Carbohidratos hablo un poco sobre el tema.
A donde quiero llegar es que para adelgazar rápido sin perder la salud hay que imponerse unos menús que sean variados no sólo en cuanto al origen de los alimentos, sino también en cuanto a la composición de los mismos, y solo cuando esta sea rica en proteínas y grasas de calidad y aporte los micronutrientes que nuestro organismo necesita lograremos adelgazar rápidamente y mantener nuestra masa muscular intacta mientras lo hacemos.
Para no caer en la rutina y abandonar nuestro propósito de luchar contra la grasa acumulada, podemos cocinar el pescado de diversas maneras, incluso frito, siempre y cuando no contenga una gran cantidad de aceite ni usemos demasiados carbohidratos en su rebozado. Para ello, podemos rebozarlo con salvado de trigo fino y freírlo en aceite muy caliente, preferiblemente de coco -que no se estropea con la temperatura-, de modo que sellemos el rebozado al introducirlo en el aceite manteniendo dentro todo el jugo del pescado con muchos de sus micronutrientes en él. Recuerda que el pescado no debe estar muy hecho para que esté jugoso y tenga buen sabor, pero no olvides tampoco que ciertas especies como por ejemplo la merluza (pescadilla, etc.) suelen estar contaminadas con anisakis y deben ser cocinadas por completo o bien congeladas previamente al menos 48 horas a muy baja temperatura.
En cuanto a la variedad, prácticamente cualquier especie me sirve. Personalmente me gusta todo el pescado y sólo le hago ascos a los de piscifactoría. Cuando voy al mercado miro qué pescados frescos han entrado y compro en función de la calidad y el precio, pero soy frecuente consumidor de borriquetes, lenguados, salmones, sardinas, boquerones, rapes, peces limón, corvinas, meros y en realidad una larga lista de pescados salvajes frescos. Lo mismo ocurre con el marisco, que consumo cuando el precio es razonable y ajustándome a las temporadas de cada especie y a sus precios. Por ejemplo, compro chirlas (almejas de Málaga) cuando están a 2 o 3 euros el kilo, en temporada, no cuando están a 11 o 12 euros y compro cigalas pequeñas de Estepona o Vélez cuando rondan los 12-14€/kg, que preparo crudas al estilo Veneciano (Scampi Crudi).
Así que ya lo sabes, si te estás planteando adelgazar o bien ya has comenzado en esta aventura y quieres ampliar tu horizonte gastronómico, mira hacia el mar. Siempre hay algún pescado de temporada en oferta que puede cocinarse de mil maneras, que te ayudará a adelgazar y que te nutrirá de manera absolutamente inigualable. En unos días publicaré algunas recetas muy sencillas para preparar pescado, así que si todavía no lo has hecho te sugiero que te suscribas al blog usando el botón que viene a continuación para no perdértelas.
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