El otro día me tropecé con una oferta de solomillo de cerdo a un precio bastante bueno y compré unos cuantos kilos. La carne fresca se puede congelar y conserva sus propiedades si se envuelve bien en papel film sin presencia de aire, lo que evita que se queme en el congelador. Congelé seis o siete solomillos enteros y preparé esta receta de solomillo de cerdo al aceite aromático con dos de ellos, que pesarían en total unos tres cuartos de kilo. Se trata de una receta muy sencilla de preparar en la que además del solomillo de cerdo, el propio aceite de coco y una serie de hierbas aromáticas utilicé champiñones y unas puntitas de jamón de ibérico.
Esta receta de solomillo de cerdo es muy adecuada para la Isodieta y para las dietas bajas en carbohidratos en general dado que a una carne muy reducida en grasa como es el solomillo le añadimos una salsa eminentemente grasa, preparada principalmente a base de aceite de coco y especias aromáticas, lo que equilibra los aportes nutricionales del plato. Además, el aporte de fibra que proporcionan los champiñones al plato hace que prácticamente se convierta en un plato único e imprescindible en un menú diseñado para adelgazar aportando los nutrientes esenciales adecuados.
Las proteínas de la carne magra del solomillo -ya sea de cerdo o de res en general- se complementan perfectamente con los ácidos grasos de los aceites vírgenes en general. Usando aceite de coco en esta receta, aportamos ácido laúrico a nuestra dieta, un tipo de ácido graso de cadena media muy difícil de encontrar en la naturaleza. El único alimento con cantidades significativas de ácido laúrico -además del aceite de coco- es la leche materna. El ácido laúrico es el precursor de la monolaurina, un monoglicérido con efectos muy positivos en el sistema inmunitario pues está demostrada su utilidad en la lucha contra bacteria, virus, hongos e infecciones en general, por lo que su consumo frecuente -más allá de las historias que hayas oído acerca del aceite de coco- es bastante recomendable.
Información nutricional
Receta de solomillo de cerdo al aceite aromático
Cantidad por ración
Calorías 358Calorías de la grasa 189
% valor diario*
Grasa total 21g32%
Grasas saturadas 14g70%
Grasas poliinsaturadas 1g
Grasas monoinsaturadas 5g
Colesterol 130mg43%
Sodio 687mg29%
Potasio 909mg26%
Carbohidratos totales 7g2%
Fibra dietética 2g8%
Azúcares 2g
Proteínas 37g74%
Vitamina A6%
Vitamina C12%
Calcio14%
Hierro10%
* Porcentajes diarios basados en una dieta de 2000 calorías.
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Receta de solomillo de cerdo al aceite aromático
Esta sencilla receta de solomillo de cerdo al aceite aromático es muy sencilla de preparar, aporta muchos nutrientes esenciales y resulta para perder peso.
50gJamón de Cerdo(`Puntas de jamón ibérico o jamón serrano)
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Instrucciones
Limpiamos las trazas de grasa externa que traiga el solomillo y lo partimos longitudinalmente en dos trozos, parando antes de las puntas, que mantenemos intactas de una pieza. Después partimos cada trozo en cuadrados de aproximadamente 2 o 3 centímetros de lado. Salpimentamos al gusto, recordando que si el jamón que usamos es serrano aportará algo de sal al plato.
En una olla baja ponemos al fuego unos 100ml de aceite de coco virgen y doramos ligeramente los ajos partidos en láminas. Añadimos el romero, el tomillo, el orégano y los champiñones cortados también en láminas y casi de inmediato la carne en cuanto los champiñones comiencen a reblandecerse. Si los champiñones son de lata, se pueden poner a la vez que la carne.
Rehogamos la carne hasta que esté hecha y en el último momento añadimos el jamón con cuidado de que se caliente durante unos segundos pero que no llegue a freirse. Hay que evitar que cambie de color y se ponga marrón, pues su sabor cambia.
Hoy os traigo una receta para hacer tallarines sin carbohidratos con pollo y champiñones. Se trata de una receta muy adecuada para nuestro plan nutricional que nos ayudará a perder peso, ofreciendo nutrientes esenciales y proporcionando una buena sensación de saciedad.
La pasta y el arroz libres de carbohidratos, de los que hablé hace poco en este otro artículo, son un magnífico aliado en nuestro empeño por adelgazar, proporcionándonos nuevas formas de comer los alimentos que necesitamos, así que animo a todo el mundo a probarlas para añadir más variedad a su dieta habitual.
Lo interesante de esta receta, si la comparamos con un simple filete de pollo a la plancha con champiñones, es que proporciona un efecto saciante mayor y un aporte extra de fibra por el glucomanano contenido en la pasta de konjac, que además, según dicen, ayuda a quemar grasa.
Información nutricional
Receta de Tallarines con Pollo y Champiñones
Cantidad por ración
Calorías 262Calorías de la grasa 90
% valor diario*
Grasa total 10g15%
Grasas saturadas 8g40%
Grasas saturadas 0.03g
Grasas poliinsaturadas 1g
Grasas monoinsaturadas 1g
Colesterol 87mg29%
Sodio 242mg10%
Potasio 626mg18%
Carbohidratos totales 3g1%
Fibra dietética 6g24%
Azúcares 1g
Proteínas 37g74%
Vitamina C6%
Calcio2%
Hierro9%
* Porcentajes diarios basados en una dieta de 2000 calorías.
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Receta de Tallarines con Pollo y Champiñones
Receta muy adecuada para nuestro plan nutricional que nos ayudará a perder peso, ofreciendo nutrientes esenciales y proporcionando sensación de saciedad.
En una sartén ponemos una cucharada sopera de Aceite de Coco Virgen y rehogamos los champiñones hasta que se empiecen a poner marrones (en lugar de blancos).
Mientras se rehogan los champiñones, abrimos el paquete de Slim Pasta Fettuccine y los enjuagamos bien varias veces bajo el grifo, dejándolos en un escurridor para que escurra toda el agua.
Añadimos a la sartén el pollo cortado en pequeños trozos y sofreímos con los champiñones unos minutos. Cuando el fuego se ha recuperado (unos minutos después de añadir el pollo), ponemos un chorro de salsa de soja. Como utilizamos salsa de soja, no es necesario añadir sal.
Cuando al pollo le queden un par de minutos (en función del tamaño de los trozos), añadimos los tallarines y movemos todo para mezclarlo bien y que se calienten todo de manera homogénea. Cuando sirvamos en el plato podemos adornar con unas semillas de sésamo negras.
Notas de la receta
El sabor en esta receta procede del Aceite de Coco y la salsa de soja al sofreír el pollo. Lo digo porque si se hiciera con aceite de oliva, quizás las semillas de sésamo negro no pegasen demasiado y se quiera probar con otro adorno. La cucharada de aceite que lleva este plato, dentro de nuestro plan nutricional diseñado para adelgazar, proporciona las grasas que nuestro organismo necesita.
¿Te ha gustado esta sencilla receta sin carbohidratos?
Hoy os traigo una receta para hacer tallarines sin carbohidratos con pollo y champiñones. Se trata de una receta muy adecuada para nuestro plan nutricional que nos ayudará a perder peso, ofreciendo nutrientes esenciales y proporcionando una buena sensación de saciedad.
La pasta y el arroz libres de carbohidratos, de los que hablé hace poco en este otro artículo, son un magnífico aliado en nuestro empeño por adelgazar, proporcionándonos nuevas formas de comer los alimentos que necesitamos, así que animo a todo el mundo a probarlas para añadir más variedad a su dieta habitual.
Lo interesante de esta receta, si la comparamos con un simple filete de pollo a la plancha con champiñones, es que proporciona un efecto saciante mayor y un aporte extra de fibra por el glucomanano contenido en la pasta de konjac, que además, según dicen, ayuda a quemar grasa.
Instrucciones de preparación de esta receta sin carbohidratos:
En una sartén ponemos una cucharada sopera de Aceite de Coco Virgen y rehogamos los champiñones hasta que se empiecen a poner marrones (en lugar de blancos). Paralelamente, abrimos el paquete de Slim Pasta Fettuccine y los enjuagamos bien varias veces bajo el grifo, dejándolos en un escurridor para que escurra toda el agua. Añadimos a la sartén el pollo cortado en pequeños trozos y sofreímos con los champiñones unos minutos. Cuando el fuego se ha recuperado (unos minutos después de añadir el pollo), ponemos un chorro de salsa de soja. Como utilizamos salsa de soja, no es necesario añadir sal.
Cuando al pollo le queden un par de minutos (en función del tamaño de los trozos), añadimos los tallarines y movemos todo para mezclarlo bien y que se calienten todo de manera homogénea. Cuando sirvamos en el plato podemos adornar con unas semillas de sésamo negras.
El sabor en esta receta procede del Aceite de Coco y la salsa de soja al sofreír el pollo. Lo digo porque si se hiciera con aceite de oliva, quizás las semillas de sésamo negro no pegasen demasiado y se quiera probar con otro adorno. La cucharada de aceite que lleva este plato, dentro de nuestro plan nutricional diseñado para adelgazar, proporciona las grasas que nuestro organismo necesita.
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