Si consigues un lenguado fresco de tamaño grande, de más de un kilo (el de la foto es de 1,5Kg), una de las mejores y más sencillas formas de prepararlo sin duda es hornearlo con un poco de mantequilla y hierbas aromáticas. Para ello, el pescadero debe haberte limpiado el pescado de vísceras y quitado la cabeza.
Al mezclar las proteínas de calidad del lenguado, que es un pescado poco graso, con las grasas de calidad de la mantequilla, obtenemos una ración de comida altamente nutritiva, muy adecuada si sigues una dieta restrictiva en carbohidratos para adelgazar o para mantener tu peso, que además te aporta micronutrientes presentes de manera natural en los pescados. Luego la puedes acompañar de un poco de ensalada o de algunas verduras bajas en carbohidratos que incluso puedes cocinar a la vez en el horno.
Información nutricional
Receta de Lenguado al Horno
Cantidad por ración
Calorías 379Calorías de la grasa 81
% valor diario*
Grasa total 9g14%
Grasas saturadas 4g20%
Grasas poliinsaturadas 1g
Grasas monoinsaturadas 2g
Colesterol 191mg64%
Sodio 595mg25%
Potasio 1364mg39%
Carbohidratos totales 1g0%
Fibra dietética 0.3g1%
Azúcares 0.01g
Proteínas 71g142%
Vitamina A6%
Vitamina C12%
Calcio8%
Hierro9%
* Porcentajes diarios basados en una dieta de 2000 calorías.
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Receta de Lenguado al Horno
Esta estupenda receta de lenguado al horno es muy fácil de preparar, altamente nutritiva y realmente exquisita. Si lo preparas, a tus hijos les encantará.
Ponemos el horno a calentar a 180º mientras preparamos el pescado.
En una fuente de horno, preferiblemente de cristal, usamos un poco de mantequilla para untar el fondo y evitar que el pescado se quede pegado. Sobre esa base de mantequilla colocamos el pescado y ponemos un poco más de mantequilla sobre él. Después podemos añadir unos toques de hierbas aromáticas, como por ejemplo perejil, albahaca o cualquiera que sea de nuestro gusto y un poco de pimienta para realzar el sabor.
Una vez que el horno haya alcanzado la temperatura de 180º procedemos a hornear el pescado durante unos 15 minutos cada medio kilo. Cada horno es único en cuanto a la forma en que cocina los alimentos, así que trataremos de estar atentos para evitar que el pescado se reseque. Cuando el lenguado esté correctamente cocinado será sencillo separar la carne de la espina, por lo que para probar podemos usar un cuchillo realizando un pequeño corte sobre la espina grande central y empujar un poco la carne para ver si se desprende con facilidad del hueso. Si se queda pegada, continuaremos horneando. Además, es relativamente fácil de saber cuando está listo porque el color cambia de blanco pálido a blanco intenso y los rosáceos deben desaparecer excepto en la zona de las huevas si las tuviesen, que se volverán anaranjados.
Notas de la receta
Desafortunadamente, con las prisas de ponerle la comida a los niños no me acordé de hacerle una foto al pescado cocinado, así que cuando prepare el siguiente actualizaré la receta para incluirlo y que podáis ver como queda si es que no os he convencido para probar la receta 🙂
Hace unos días hablaba de la importancia de incorporar pescado y marisco a la dieta y prometía que traería algunas recetas al blog para dar unas ideas distintas de platos que podemos preparar incluso en navidad. Este plato es realmente sencillo de preparar pero requiere de una materia prima de primera calidad y muy fresca, así que más que decidir qué día queremos prepararlo, debemos estar atentos al mercado y cuando se presente la oportunidad, por precio y por características, atrevernos a probarlo. Este plato que traigo hoy sólo tiene un ingrediente principal, las cigalas, y tres aderezos: aceite de oliva virgen extra, aceto balsámico de Módena y sal en escamas. También puede prepararse con gamba roja del mediterráneo, que en la zona sur llamamos gambas de Garrucha, por el caladero del pueblo almeriense del que suelen proceder.
La proteína del marisco, a diferencia de otras proteínas que también son de alta calidad, como por ejemplo la del huevo, se puede asimilar bien en crudo, lo que hace que este sencillo plato sea muy nutritivo puesto que a su proteína de alta calidad vamos a añadir aceite de oliva virgen extra, también en crudo, sin alterar sus propiedades, una grasa de alta calidad que complementa a la perfección la ingesta de proteínas. Comencé a interesarme por los pescados y mariscos crudos hace ya bastantes años cuando tuve la suerte de poder comer en el restaurante Marea del chef Michael White en un viaje que hice a Nueva York. Como parte del menú degustación que tomamos, la mayor parte del pescado y el marisco que nos sirvieron -mucha variedad en muy pequeñas porciones- estaba absolutamente crudo. En aquel momento me produjo cierto recelo comer aquellos pescados y mariscos absolutamente crudos, pero al probar el primero comprendí lo que me había estado perdiendo hasta ese momento. Si todavía no lo has probado, trata de dejar de lado tus prejuicios y dale una oportunidad, porque te garantizo que te va a sorprender.
Originalmente, esta receta creo que es Veneciana y se llama Scampi Crudi, y se prepara con cigalas de tamaño pequeño, de unos 10-12 centímetros desde la cabeza a la cola, sin contar las patas principales. Las cigalas (o gambas rojas si decides hacerlo así) deben ser muy frescas, pues las consumiremos crudas. Otra opción es comprarlas congeladas y consumirlas una vez que se hayan descongelado, pero el resultado no será el mismo porque la textura del marisco y del pescado cambia tras la congelación.
Como verás, te estoy sugiriendo que comas marisco crudo, mejor sin congelar, y esto va en contra de todo lo que nos dicen sobre el anisakis. No voy a extenderme mucho, pero hasta donde yo he podido investigar, el anisakis no infecta las gambas ni las cigalas y, en cualquier caso, al ser visible a simple vista en el pescado fresco, a mí me basta con estar muy atento cuando lo pelo. El anisakis vive en las vísceras de los pescados (principalmente merluza) y una vez muerto migra hacia el músculo, donde forma quistes. Si el pescado está muy fresco, aunque tenga anisakis, este se eliminará al eviscerar el pescado. Si ya no está tan fresco, el parásito habrá migrado hacia el músculo y será más difícil de eliminar sin congelar ni cocinar. En cualquier caso, la zona de la ventresca y cercana a la cabeza es donde debemos prestar la máxima atención al limpiar o trocear el pescado. Si vas a consumir pescado crudo y decides no congelarlo, asegúrate de que es muy fresco, cómpralo sin vísceras y córtalo en casa, de manera que puedas examinarlo mientras lo cortas. En cualquier caso, es tu responsabilidad congelar o cocinar el pescado antes de consumirlo y yo sólo te cuento lo que yo he hecho o lo que hago habitualmente, cómo lo hago y porqué lo hago así, y si no tienes la seguridad de que el marisco o el pescado está libre de anisakis, lo más sensato es congelarlo o cocinarlo.
Volviendo a la receta, este plato debemos prepararlo justo antes de comer dado que su preparación es rápida y no tiene complicación alguna. Hasta el momento de la preparación, el marisco debe estar en frío, en la nevera por debajo de 5 grados.
Información nutricional
Receta de cigalas al natural (Scampi Crudi)
Cantidad por ración
Calorías 165Calorías de la grasa 63
% valor diario*
Grasa total 7g11%
Grasas saturadas 1g5%
Grasas poliinsaturadas 1g
Grasas monoinsaturadas 4g
Colesterol 178mg59%
Sodio 491mg20%
Potasio 437mg12%
Carbohidratos totales 0.3g0%
Azúcares 0.2g
Proteínas 25g50%
Vitamina A2%
Vitamina C2%
Calcio3%
Hierro5%
* Porcentajes diarios basados en una dieta de 2000 calorías.
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Receta de cigalas al natural (Scampi Crudi)
Esta sencilla receta de cigalas al natural (scampi crudi) es altamente nutritiva y te permite seguir tu dieta baja en carbohidratos sin renunciar a los sabores y texturas.
Vamos a pelar las cigalas quitándoles la cáscara de la cola y dejando la cabeza y las patas pegadas al tronco, de forma que conserve su forma natural pero libre del exoesqueleto en el troco y la cola. El último anillo antes de la cabeza es el más complicado de quitar. Algunas personas no se lo quitan porque les cuesta hacerlo sin separar el tronco de la cabeza. Prueba a ver si puedes y si no lo dejas puesto, pues como ves en las fotos es bastante habitual.
En una bandeja iremos depositando las cigalas y mantendremos en todo momento el frío. Si nos vamos a demorar antes de consumirlas, las taparemos con un film y las meteremos en la nevera. Unos tres minutos antes de consumirlas, las rociaremos, en este orden, con un chorrito de Aceite de Oliva Virgen Extra, unas gotas de Aceto Balsámico de Módena, y finalmente sal en escamas.
Notas de la receta
Si no tienes costumbre de consumir pescado y marisco crudo, esta receta te puede resultar algo extraña, pero si logras concentrarte en el sabor y la textura que vas a experimentar, puedo garantizarte que no querrás comer cigalas de ninguna otra forma en el futuro. Al evitar su cocinado, los sabores intensos del marisco y el agua de mar se acentúan al aderezarlos con el Aceite de Oliva, el vinagre de Módena y la sal en escamas. Opcionalmente, un ligero toque de pimienta molida puede terminar de resaltar todos los sabores del marisco.
Otros mariscos que mejoran ostensiblemente en sabor y textura al cocinarlos poco o consumirlos crudos son la gamba roja del mediterráneo (gambas de garrucha si vives en Andalucía) y los camarones (quisquillas si vives en la Costa del Sol).
Tanto si has estado alguna vez en Nueva York como si no, es más que probable que hayas oído hablar del típico sándwich de pastrami caliente tan habitual en la gran manzana. Creo que la única comida más típica de las calles neoyorkinas es sin duda el Pretzel caliente, pero de esos no tengo [todavía] una receta baja en carbohidratos que puedas preparar aunque estés adelgazando siguiendo una alimentación lowcarb o cetogénica.
Sin embargo, sí que tengo una receta lowcarb del sándwich de pastrami caliente que sirven en los Delis de Manhattan y aunque me ha costado bastante conseguir un Pastrami decente, el resto de los ingredientes están disponibles de manera relativamente sencilla en varias webs de las habituales de nutrición dietética.
Por si te lo estás preguntando, el Pastrami es un corte de carne de vacuno sometido primero a salazón y luego a ahumado y cocción, usando diversas especias que le confieren un exquisito sabor. Se trata de un preparado cárnico de alta calidad muy rico en proteínas y absolutamente carente de carbohidratos. Su contenido de grasa es bastante reducido también, por lo que podemos usar un queso graso en la receta sin disparar las cantidades de grasa de la receta terminada. Y ahora sin más, vamos a ponernos manos a la obra, no sin antes advertir que el pastrami es duro por naturaleza y para degustarlo adecuadamente hay que hacer lonchas muy finas, así que si vas a prepararlo, asegúrate de cortarlo muy fino o acude a una charcutería especializada para que te lo corten así. La pieza que yo he conseguido viene de Astorga, en León, y está preparada por los artesanos de Cecinas Pablo.
Información nutricional
Receta LowCarb de Sandwich de Pastrami Caliente
Cantidad por ración
Calorías 214Calorías de la grasa 108
% valor diario*
Grasa total 12g18%
Grasas saturadas 5g25%
Grasas poliinsaturadas 0.2g
Grasas monoinsaturadas 2g
Colesterol 43mg14%
Sodio 489mg20%
Potasio 116mg3%
Carbohidratos totales 6g2%
Fibra dietética 18g72%
Azúcares 1g
Proteínas 23g46%
Vitamina A8%
Vitamina C1%
Calcio172%
Hierro5%
* Porcentajes diarios basados en una dieta de 2000 calorías.
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Receta LowCarb de Sandwich de Pastrami Caliente
Esta fabulosa receta LowCarb de Sandwich de Pastrami Caliente te permitirá disfrutar de uno de los sandwiches más típicos sin salirte de tu dieta cetogénica
Seamos sinceros: estamos preparando un sándwich, no un Goulash, así que la preparación es bien sencilla. Necesitarás, eso sí, una plancha caliente o una sadwichera para conseguir que el queso suizo se derrita y el pastrami se caliente. La única dificultad de esta receta radica en el corte del Pastrami. Salvo que tengas una máquina, lo mejor es pedir a un charcutero que te lo lonchee muy fino. En la foto veis media hora de sufrimiento con cuchillos muy afilados. No se lo deseo a nadie...
La ventaja del Protobread de CiaoCarb es que la proteína y fibra que lo componen resisten mucho mejor el calor que los carbohidratos del pan convencional, así que puedes darle bastante tiempo de plancha o sandwichera sin que se te queme como ocurriría con el pan blanco.
No hace falta poner mucho queso ni mucha mostaza, solo un poquito para darle alegría al sándwich.
La idea es hacer sándwiches pequeños con rebanadas ligeras de Protobread, en los que el verdadero protagonista sea el Pastrami aderezado con la mostaza y el queso suizo.
Notas de la receta
En las fotos podéis ver como además he decorado el plato en plan americano, pero reduciendo al máximo los carbohidratos.
Los Nachos son los Lean Chips, unos preparados bajos en carbohidratos y grasa, de los que no conviene abusar pero que son perfectos para estas pequeñas ocasiones. En los cuencos, nata agria y guacamole natural, hecho en casa, con un aguacate y algunas especias.
Además de este Sandwich LowCarb de Pastrami Caliente, en la sección de recetas del blog podrás encontrar otros sándwiches, incluyendo mi receta baja en carbohidratos de un sandwich BLT con pan de lino hecho en casa siguiendo esta videoreceta o de un típico Sandwich Club. ¿Tienes interés en algún plato concreto? ¡Deja un comentario y te contestaré si es posible hacer una alternativa baja en carbohidratos!
¿Te ha gustado esta sencilla receta sin carbohidratos?
Hace unos días publiqué un artículo hablando del Cauli Rice, un producto que me pareció interesante porque básicamente se trata de coliflor cocida y precortada, y en ese artículo adelanté que colgaría la receta para hacer una masa de pizza súper-saludable en el blog, y hoy voy a cumplir mi promesa escribiendo esta receta de pizza low-carb preparada con una masa a base de coliflor, huevo y queso.
Los que estáis comenzando con vuestra dieta low-carb, debéis tener en cuenta que para adelgazar, además de controlar los carbohidratos al máximo, hay que ingerir las cantidades adecuadas del resto de nutrientes. Algunas recetas, como esta, aunque son bajas en carbohidratos, son ricas en grasa. Pueden ser adecuadas para mantener el peso corporal o incluso para ganar músculo si, como esta receta, llevan la suficiente proteína de calidad, pero será muy difícil adelgazar ingiriendo grandes cantidades de grasa, por más saludable que esta sea como en el caso de esta receta.
Esta receta de masa de pizza low-carb parte del principio básico de la sustitución de la harina refinada (carbohidratos de absorción rápida) por otro alimento bajo en carbohidratos que pueda hacer un trabajo similar al que hace la harina, en este caso servir como base para crear una pizza. Se puede hacer de dos formas, usando coliflor tradicional o usando un paquete del Cauli Rice del que hablé hace unos días. Si usáis coliflor tradicional, lo único que tendréis que hacer es cocerla y cortarla muy fina, para que acabe con la misma textura que el Cauli Rice, o sea, en trocitos diminutos. En otras palabras, cuando hablo en la receta de Cauli Rice estoy hablando de coliflor picada muy fina y previamente cocida.
Información nutricional
Receta de Pizza Low Carb con masa de coliflor
Cantidad por ración
Calorías 197Calorías de la grasa 108
% valor diario*
Grasa total 12g18%
Grasas saturadas 6g30%
Grasas poliinsaturadas 1g
Grasas monoinsaturadas 3g
Colesterol 89mg30%
Sodio 444mg19%
Potasio 89mg3%
Carbohidratos totales 3g1%
Fibra dietética 1g4%
Azúcares 1g
Proteínas 19g38%
Vitamina A8%
Vitamina C1%
Calcio33%
Hierro6%
* Porcentajes diarios basados en una dieta de 2000 calorías.
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Receta de Pizza Low Carb con masa de coliflor
Usa esta sencilla receta de pizza low carb con masa de coliflor para prepararte una pizza baja en carbohidratos que no te haga saltarte tu plan nutricional
Ponemos el horno a calentar a 200 grados. Para preparar la base de la pizza secaremos con papel absorbente el exceso de humedad de la coliflor picada, ya sea cocida por nosotros o procedente de un paquete de Cauli Rice. En un bowl batiremos un huevo y lo mezclaremos con la coliflor, el queso y una pizca de orégano. Si lo deseamos, podemos añadir un poco de sal y pimienta en este punto para resaltar el sabor.
En una bandeja de horno ponemos un papel de horno y sobre él esparcimos la mezcla apretando con una cuchara para hacerla fina y consistente.
Cuando la tengamos lista en el tamaño y forma adecuadas, la metemos en el horno hasta que esté ligeramente dorada en los bordes, normalmente entre 20 y 30 minutos, en función del horno.
Preparación de la pizza
Cuando la base comience a estar dorada, la sacamos del horno y preparamos como una pizza normal, añadiendo primero el tomate, luego el queso, sobre este el topping de nuestra elección (por ejemplo atún, jamón, salmón...) y terminamos con un chorrito de aceite de oliva virgen extra y una pizca de orégano. Opcionalmente, se puede añadir un huevo crudo al centro, como hice yo con esta.
Devolvemos al horno y doramos entre 8 y 10 minutos más, en función de nuestro horno, o hasta que esté lista. En hornos de aire, los tiempos bajan, así que como siempre recomiendo, mejor mirar por la ventana del horno frecuentemente que fiarse de los tiempos.
Notas de la receta
¿Te ha gustado esta sencilla receta sin carbohidratos?
El otro día me tropecé con una oferta de solomillo de cerdo a un precio bastante bueno y compré unos cuantos kilos. La carne fresca se puede congelar y conserva sus propiedades si se envuelve bien en papel film sin presencia de aire, lo que evita que se queme en el congelador. Congelé seis o siete solomillos enteros y preparé esta receta de solomillo de cerdo al aceite aromático con dos de ellos, que pesarían en total unos tres cuartos de kilo. Se trata de una receta muy sencilla de preparar en la que además del solomillo de cerdo, el propio aceite de coco y una serie de hierbas aromáticas utilicé champiñones y unas puntitas de jamón de ibérico.
Esta receta de solomillo de cerdo es muy adecuada para la Isodieta y para las dietas bajas en carbohidratos en general dado que a una carne muy reducida en grasa como es el solomillo le añadimos una salsa eminentemente grasa, preparada principalmente a base de aceite de coco y especias aromáticas, lo que equilibra los aportes nutricionales del plato. Además, el aporte de fibra que proporcionan los champiñones al plato hace que prácticamente se convierta en un plato único e imprescindible en un menú diseñado para adelgazar aportando los nutrientes esenciales adecuados.
Las proteínas de la carne magra del solomillo -ya sea de cerdo o de res en general- se complementan perfectamente con los ácidos grasos de los aceites vírgenes en general. Usando aceite de coco en esta receta, aportamos ácido laúrico a nuestra dieta, un tipo de ácido graso de cadena media muy difícil de encontrar en la naturaleza. El único alimento con cantidades significativas de ácido laúrico -además del aceite de coco- es la leche materna. El ácido laúrico es el precursor de la monolaurina, un monoglicérido con efectos muy positivos en el sistema inmunitario pues está demostrada su utilidad en la lucha contra bacteria, virus, hongos e infecciones en general, por lo que su consumo frecuente -más allá de las historias que hayas oído acerca del aceite de coco- es bastante recomendable.
Información nutricional
Receta de solomillo de cerdo al aceite aromático
Cantidad por ración
Calorías 358Calorías de la grasa 189
% valor diario*
Grasa total 21g32%
Grasas saturadas 14g70%
Grasas poliinsaturadas 1g
Grasas monoinsaturadas 5g
Colesterol 130mg43%
Sodio 687mg29%
Potasio 909mg26%
Carbohidratos totales 7g2%
Fibra dietética 2g8%
Azúcares 2g
Proteínas 37g74%
Vitamina A6%
Vitamina C12%
Calcio14%
Hierro10%
* Porcentajes diarios basados en una dieta de 2000 calorías.
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Receta de solomillo de cerdo al aceite aromático
Esta sencilla receta de solomillo de cerdo al aceite aromático es muy sencilla de preparar, aporta muchos nutrientes esenciales y resulta para perder peso.
50gJamón de Cerdo(`Puntas de jamón ibérico o jamón serrano)
Votos: 1
Valoración: 5
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Instrucciones
Limpiamos las trazas de grasa externa que traiga el solomillo y lo partimos longitudinalmente en dos trozos, parando antes de las puntas, que mantenemos intactas de una pieza. Después partimos cada trozo en cuadrados de aproximadamente 2 o 3 centímetros de lado. Salpimentamos al gusto, recordando que si el jamón que usamos es serrano aportará algo de sal al plato.
En una olla baja ponemos al fuego unos 100ml de aceite de coco virgen y doramos ligeramente los ajos partidos en láminas. Añadimos el romero, el tomillo, el orégano y los champiñones cortados también en láminas y casi de inmediato la carne en cuanto los champiñones comiencen a reblandecerse. Si los champiñones son de lata, se pueden poner a la vez que la carne.
Rehogamos la carne hasta que esté hecha y en el último momento añadimos el jamón con cuidado de que se caliente durante unos segundos pero que no llegue a freirse. Hay que evitar que cambie de color y se ponga marrón, pues su sabor cambia.
Algunos días vuelvo tarde a casa de la oficina y cuando llego todo el mundo ha cenado ya. En ocasiones me han dejado algo de lo que hayan comido, pero otras veces los pequeños roedores no han dejado sobras y me toca buscarme la vida, algo que por otro lado no me desagrada del todo. El otro día llegaba a a casa tarde y me encontraba unas muestras de salsas que me habían enviado para probar, así que viendo que no había nada preparado me dispuse a probar una de ellas. Pero era tarde y no tenía demasiadas ganas de complicarme la vida, así que me inventé esta receta que hice en tres minutos aprovechando sobras del fin de semana anterior.
El domingo había preparado un costillar de cerdo en el grill y habían sobrado unas cuantas costillas, que estaban guardadas en la nevera, así que las saqué y las preparé junto con un paquete de Slim Pasta, unas cuantas alcachofas baby que tenía en un bote abierto también en la nevera y una de las salsas que había recibido. Lo cierto es que me gustó tanto que se me ocurrió subir la receta por si la queréis probar.
Información nutricional
Receta de Fettuccine con Costilla Barbacoa
Cantidad por ración
Calorías 393Calorías de la grasa 261
% valor diario*
Grasa total 29g45%
Grasas saturadas 14g70%
Grasas poliinsaturadas 2g
Grasas monoinsaturadas 11g
Colesterol 78mg26%
Sodio 318mg13%
Potasio 701mg20%
Carbohidratos totales 4g1%
Fibra dietética 19g76%
Proteínas 20g40%
Vitamina A2%
Vitamina C11%
Calcio6%
Hierro24%
* Porcentajes diarios basados en una dieta de 2000 calorías.
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Receta de Fettuccine con Costilla Barbacoa
Esta estupenda receta de Fettuccine con Costilla Barbacoa se prepara en solo tres minuto y no contiene carbohidratos, por lo que te permite adelgazar disfrutando.
Abrimos el paquete de Slim Pasta Fettuccine y lo enjuagamos abundantemente con agua fría. Yo suelo dejarlo escurrir y volver a enjuagarlo dos o tres veces hasta que desaparece por completo el olor a cerrado característico del paquete. Lo dejamos escurrir por última vez.
En una sartén con una cucharada de Aceite de Coco Virgen ponemos a rehogar la verdura y cuando esté en su punto añadimos la carne para que se caliente. Yo he utilizado unas costillas que tenía hechas en la nevera, limpiando el exceso de grasa y troceándolas una vez había retirado los huesos, pero se pede utilizar cualquier carne troceada que os haya sobrado de otra receta.
Cuando todo el rehogado esté caliente, subimos el fuego y añadimos los Fettuccine Slim Pasta y las dos cucharadas de salsa barbacoa, moviendo mientras hierve para impregnar todo con la salsa. Yo no le añado sal porque la carne ya tenía y la salsa también tiene algo, pero se puede añadir sal a gusto si es necesario.
Notas de la receta
Quizás la foto no hace honor al resultado real, que fue un plato realmente sabroso y altamente saciante a la vez que muy nutritivo.
Con todo el revuelo que se ha levantado con el artículo que publique acerca de la calidad de la «carne» de Mercadona y en menor medida de Carrefour, he recibido críticas porque aparentemente no sé diferenciar -o eso dicen- entre una carne procesada y una carne fresca. No voy a perder mucho tiempo en explicar aquí las diferencias, pero sí voy a demostrar que por menos dinero del que cuesta una «carne» tremendamente adulterada y mezclada con toda suerte de ingredientes que tienen poco o nada que ver con la carne, se puede preparar una cinta de lomo de manera sencilla, sabrosa, jugosa e infinitamente más nutritiva. Algunas personas me han dicho que compran estas «carnes» porque son más jugosas que la carne de verdad, y con esta receta creo que van a cambiar de idea. Esta es, sin duda, una de las recetas de lomo de cerdo que consiguen una carne más jugosa, tierna y natural, y como estáis a punto de ver se hace en un abrir y cerrar de ojos con una dificultad mínima. Para aquellos que me dicen que toda la carne tiene ingredientes adicionales para ser tierna, jugosa, sabrosa, etc, que por favor me digan qué tiene esta carne…
Información nutricional
Receta de Lomo de Cerdo al Bacon
Cantidad por ración
Calorías 454Calorías de la grasa 270
% valor diario*
Grasa total 30g46%
Grasas saturadas 10g50%
Grasas poliinsaturadas 3g
Grasas monoinsaturadas 13g
Colesterol 135mg45%
Sodio 586mg24%
Potasio 760mg22%
Carbohidratos totales 1g0%
Fibra dietética 0.2g1%
Azúcares 0.004g
Proteínas 43g86%
Vitamina A0.2%
Vitamina C2%
Calcio4%
Hierro10%
* Porcentajes diarios basados en una dieta de 2000 calorías.
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Receta de Lomo de Cerdo al Bacon
Esta sencilla receta de cinta de lomo de cerdo al bacon se prepara en 5 minutos y el resultado es una carne increíblemente jugosa y natural, muy nutritiva y libre de aditivos.
Salpimentamos abundantemente la cinta de lomo y la rodeamos de tiras de bacon ahumado.
Sobre el bacon espolvoreamos unas hierbas aromáticas o provenzales y dejamos atemperar si la carne viene del frigorífico, al menos media hora. Mientras tanto, ponemos el horno a calentar a máxima potencia.
En una fuente, preferiblemente para carne, de las que tienen rejilla elevadora para que la carne no quede metida en el jugo que suelte el bacon, metemos la carne en el horno y contamos 15 minutos. En este tiempo, el bacon y los laterales expuestos de la carne se harán rápidamente a máxima temperatura y sellarán la carne para que no se escapen los jugos de la misma.
Una vez transcurrido el cuarto de hora, bajamos la temperatura a 180º y dejamos cocinar entre 75 y 90 minutos. Si disponéis de un termómetro de carne, lo idóneo es probar el centro pasados 75 minutos y decidir si es necesario dejarla 15 minutos más, que es lo más probable en los hornos que no sean de aire. Transcurridos los 75-90 minutos adicionales a los 15 iniciales, sacamos la carne del horno y la dejamos reposar 5 minutos más antes de cortarla. Ojo, que al cortarla saldrá bastante jugo (mirar la foto más abajo), pero la carne estará tan jugosa que os parecerá increíble que sea cinta de lomo.
Notas de la receta
Ahora, si alguien quiere, que me diga que esta carne no es más barata, nutritiva y jugosa que el preparado que venden las grandes superficies. Es una pena que las fotos no se puedan probar 🙂
Por cierto, ni que decir tiene que si estás tratando de adelgazar, esta receta es absolutamente válida para La Isodieta o cualquier otro plan nutricional bajo en carbohidratos. Si todavía no te has animado a seguir una dieta de este tipo y no te fías de los resultados, quizás te interese saber que durante todo el mes de Octubre de 2015, Amazon tiene una oferta increíble con un 75% de descuento comprando la versión electrónica del libro Adelgazar sin Milagros, que puedes encontrar pinchando aquí o pulsando sobre el enlace que aparece un poco más abajo.
Después de muchos meses me he decidido a realizar una nueva versión del vídeo tutorial para hacer batidos de proteínas. Lo cierto es que la primera versión que hice se había quedado un poco obsoleta y como recibe miles de visitas en YouTube, he creído que era el momento de hacer una nueva versión mejorada en HD y realizada profesionalmente. En esta ocasión, utilizo la proteína de alta calidad Vitality 95, Aceite de Coco Virgen Ecológico, Cola Cao 0% Fibra y un nuevo batidor que compré en Amazon y que le da a mis batidos una consistencia mucho más cremosa.
Los batidos de proteína son una opción magnífica en las dietas de control de peso e incluso de mantenimiento. Nos permiten añadir nutrientes de alta calidad a nuestra dieta diaria sin tener que pensar demasiado y nos sacan de un apuro en cualquier momento. Se preparan de manera fácil y rápida, tienen un sabor excelente y su poder saciante -en parte gracias a las grasas que le añadimos- es espectacular. Yo tengo por costumbre desayunar un batido de proteínas cuando me levanto, sobre las 6am, porque a esa hora ni tengo hambre ni tengo ganas de ponerme a prepararme nada. Más adelante, sobre las 10, desayuno nuevamente, pero este batido me aporta todo lo que necesito hasta que llega la hora de desayunar. También suelo tomarme un Té verde después del batido o incluso a veces un café. Pero donde están los nutrientes de calidad es en el batido, no en la infusión.
Espero que os guste 😉
Información nutricional
Cómo Preparar Batidos de Proteínas
Cantidad por ración
Calorías 211Calorías de la grasa 99
% valor diario*
Grasa total 11g17%
Grasas saturadas 10g50%
Grasas poliinsaturadas 0.4g
Grasas monoinsaturadas 1g
Colesterol 0.3mg0%
Sodio 6mg0%
Potasio 118mg3%
Carbohidratos totales 9g3%
Fibra dietética 9g36%
Azúcares 0.4g
Proteínas 23g46%
Calcio13%
Hierro6%
* Porcentajes diarios basados en una dieta de 2000 calorías.
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Cómo Preparar Batidos de Proteínas
En esta videoreceta os muestro como se puede preparar un delicioso batido de proteína con grasas de calidad en sólo un par de minutos y con extrema facilidad.
Añadimos en el vaso de la batidora el agua fría. Es importante que el agua esté muy fría para que el batido emulsione bien.
Añadimos al agua el Cola Cao 0% Fibra, el salvado de trigo y la proteína e introducimos en la batidora hasta que emulsione. Notaremos que empieza a emulsionar por el ruido de la batidora, la mezcla será algo más espesa. En ese momento añadimos el Aceite de Coco.
Notas de la receta
¿Te ha gustado esta sencilla receta sin carbohidratos?
El sábado pasado me quedé a solas con mi hijo Nacho para comer y cometí el error de preguntarle qué es lo que quería que le cocinase, a lo que él, que es muy cocinilla, me dijo que una Lasaña. No entrañaría mayor dificultad si no fuese porque eran ya las dos de la tarde y no estaba por la labor de comer un plato rico en carbohidratos. La solución: una Lasaña de urgencia que apañé con un par de paquetes de Slim Pasta Lasagne… y por supuesto prácticamente sin carbohidratos. Aquí os dejo la receta de esta riquísima receta de Lasaña sin carbohidratos, y aprovecho para incluir la palabra low-carben el blog, que es más corta y suena mejor que «sin carbohidratos» 🙂
Para la bechamel, además de la sencilla propuesta que incluyo, podéis utilizar la salsa bechamel que se incluye en el libro Cocinar sin Carbohidratos.
Información nutricional
Receta de Lasaña Mixta low-carb
Cantidad por ración
Calorías 657Calorías de la grasa 414
% valor diario*
Grasa total 46g71%
Grasas saturadas 27g135%
Grasas saturadas 0.4g
Grasas poliinsaturadas 6g
Grasas monoinsaturadas 10g
Colesterol 204mg68%
Sodio 1535mg64%
Potasio 693mg20%
Carbohidratos totales 9g3%
Fibra dietética 14g56%
Azúcares 4g
Proteínas 48g96%
Vitamina A33%
Vitamina C13%
Calcio59%
Hierro12%
* Porcentajes diarios basados en una dieta de 2000 calorías.
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Receta de Lasaña Mixta low-carb
Esta magnífica receta low-carb para preparar lasaña nos permite preparar un plato bajo en carbohidratos sin renunciar al sabor de una buena pasta al horno.
Antes de nada ponemos el horno a calentarse a 220º C.
Para empezar, salteamos el pollo salpimentado y cortado en pequeños trozos en una sartén con un poco de aceite de coco y apartamos.
En esa misma sartén añadimos un poco más de aceite de coco y freímos media lata de tomate natural triturado. Reducirá bastante porque la mayor parte de la lata es agua. En cualquier caso, lo que queremos es tener un poco de tomate frito para manchar la nata que añadiremos a continuación. Cuando tengamos la nata de color rosáceo y con olor a tomate, apartamos del fuego.
En un escurridor enjuagamos muy bien las láminas de lasaña Slim Pasta y las secamos con unas servilletas absorbentes. En una bandeja de cristal ponemos un par de cucharadas de la salsa de nata y tomate (sin pollo) y esparcimos por el fondo. A continuación ponemos la primera capa de hojas de lasaña. Son bastante estrechas -también sirven para hacer canelones- así que en la fuente de la foto yo he usado 4 planchas en cada capa y más o menos se puede ver donde está el corte mirando a la izquierda.
Sobre la primera capa de pasta sin carbohidratos colocamos una loncha de jamón cocido y otra de queso, hasta cubrir por completo las láminas. Yo he usado queso cheddar y por eso en la foto de arriba se ve tan amarillo. No, no eran mis quesos inmortales ni radiactivos... Inmediatamente encima del queso ponemos unas cucharadas del pollo con un poco de salsa y cubrimos con otra capa de pasta. Repetimos la operación hasta acabar con todo el relleno y las láminas de pasta. Una vez que tenemos toda la lasaña montada usamos el excedente de salsa para cubrir y añadimos encima un poco de queso para gratinar.
Horneamos unos 20 minutos, hasta que la superficie esté dorada y voilà
Notas de la receta
Para esta Lasaña en lugar de bechamel he utilizado una salsa con tomate frito natural y nata, pero podría igualmente haber preparado una bechamel sin carbohidratos siguiendo la receta del libro Cocinar sin Carbohidratos.
Como veréis, basta con sustituir la pasta tradicional con pasta sin carbohidratos y echarle un poco de creatividad al tema para tener un plato apetecible y perfectamente compatible con nuestra dieta baja en carbohidratos.
¿Te ha gustado esta sencilla receta sin carbohidratos?
Hoy os traigo una receta para hacer tallarines sin carbohidratos con pollo y champiñones. Se trata de una receta muy adecuada para nuestro plan nutricional que nos ayudará a perder peso, ofreciendo nutrientes esenciales y proporcionando una buena sensación de saciedad.
La pasta y el arroz libres de carbohidratos, de los que hablé hace poco en este otro artículo, son un magnífico aliado en nuestro empeño por adelgazar, proporcionándonos nuevas formas de comer los alimentos que necesitamos, así que animo a todo el mundo a probarlas para añadir más variedad a su dieta habitual.
Lo interesante de esta receta, si la comparamos con un simple filete de pollo a la plancha con champiñones, es que proporciona un efecto saciante mayor y un aporte extra de fibra por el glucomanano contenido en la pasta de konjac, que además, según dicen, ayuda a quemar grasa.
Información nutricional
Receta de Tallarines con Pollo y Champiñones
Cantidad por ración
Calorías 262Calorías de la grasa 90
% valor diario*
Grasa total 10g15%
Grasas saturadas 8g40%
Grasas saturadas 0.03g
Grasas poliinsaturadas 1g
Grasas monoinsaturadas 1g
Colesterol 87mg29%
Sodio 242mg10%
Potasio 626mg18%
Carbohidratos totales 3g1%
Fibra dietética 6g24%
Azúcares 1g
Proteínas 37g74%
Vitamina C6%
Calcio2%
Hierro9%
* Porcentajes diarios basados en una dieta de 2000 calorías.
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Receta de Tallarines con Pollo y Champiñones
Receta muy adecuada para nuestro plan nutricional que nos ayudará a perder peso, ofreciendo nutrientes esenciales y proporcionando sensación de saciedad.
En una sartén ponemos una cucharada sopera de Aceite de Coco Virgen y rehogamos los champiñones hasta que se empiecen a poner marrones (en lugar de blancos).
Mientras se rehogan los champiñones, abrimos el paquete de Slim Pasta Fettuccine y los enjuagamos bien varias veces bajo el grifo, dejándolos en un escurridor para que escurra toda el agua.
Añadimos a la sartén el pollo cortado en pequeños trozos y sofreímos con los champiñones unos minutos. Cuando el fuego se ha recuperado (unos minutos después de añadir el pollo), ponemos un chorro de salsa de soja. Como utilizamos salsa de soja, no es necesario añadir sal.
Cuando al pollo le queden un par de minutos (en función del tamaño de los trozos), añadimos los tallarines y movemos todo para mezclarlo bien y que se calienten todo de manera homogénea. Cuando sirvamos en el plato podemos adornar con unas semillas de sésamo negras.
Notas de la receta
El sabor en esta receta procede del Aceite de Coco y la salsa de soja al sofreír el pollo. Lo digo porque si se hiciera con aceite de oliva, quizás las semillas de sésamo negro no pegasen demasiado y se quiera probar con otro adorno. La cucharada de aceite que lleva este plato, dentro de nuestro plan nutricional diseñado para adelgazar, proporciona las grasas que nuestro organismo necesita.
¿Te ha gustado esta sencilla receta sin carbohidratos?
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