Ahora que hemos acabado definitivamente con los excesos de las fiestas, muchas personas ponen en marcha un plan de choque para adelgazar y perder esos kilos que se han ganado en navidad. Quiero recordar antes de nada, como explico en el libro, que es científicamente imposible ganar una cantidad sustancial de grasa en unos pocos días del mismo modo que es imposible perderla. El organismo sólo puede acumular o eliminar determinadas cantidades diarias -que no son muy grandes- pero una cosa es engordar y adelgazar, o sea, ganar y perder grasa, y otra muy distinta es ganar y perder peso.
Durante estas fiestas yo no he tomado dulces, entre otras cosas porque puestos a cometer algún exceso tengo otras preferencias. Admito que han caído algunas cervezas y copas de champagne y no he podido evitar comer pan, piquitos e incluso pizza algunos días. Bueno, sí lo he podido evitar pero básicamente no he querido. Las fiestas son para festejar. El caso es que ayer por la mañana, al pesarme, tenía 3,9Kg de más. Sí, ¡casi 4 kilos! Que no cunda el pánico, no es lo que parece. Mis pequeños excesos de algunos días de estas fiestas no son capaces de meterme en el cuerpo 4 kilos de grasa, pero desde luego sí de peso.
Ayer puse en marcha mi plan de choque para adelgazar y librarme de esos kilos adicionales. Mi plan es muy sencillo y funciona a la perfección. El primer día del plan, o sea ayer, fui ultra riguroso con las raciones que comía y evité por completo la sal para favorecer la expulsión de líquidos. Desde que me levanté hasta que me acosté comí 6 veces. 4 de esas comidas fueron batidos de Caseina, la quinta una tortilla francesa en un bar a media mañana y la sexta un snack de proteínas. La razón es doble. Por un lado, tuve un control absoluto sobre las cantidades de proteínas y grasas que ingerí y por otro lado evité realizar comidas que despertasen mi apetito o alimentos de los que me apeteciera comer más de lo indicado.
El resultado no se ha hecho esperar: esta mañana había perdido 2,7Kg de esos 3,9Kg de más, o sea, me había quitado de encima todo el agua que he acumulado en las fiestas. Por lo tanto, el resultado neto de estas fiestas, para mí, ha sido ganar 1,2 Kg de grasa y situar la báscula en 84,2. Para el domingo pretendo haber vuelto a los 83 en los que estaba. No parece un peaje demasiado duro (de miércoles a domingo) por mis pequeños flirteos con los carbohidratos durante las fiestas. Sin embargo, hoy continuo con mi plan de choque y pongo en marcha otras acciones que os cuento por si os queréis animar.
Hoy vuelvo a la normalidad en cuanto a las comidas que hago. Al levantarme a las 6 me he tomado mi batido de proteínas con aceite de coco virgen y hasta después del gimnasio no volveré a tomarme otro batido. El resto de comidas serán sólidas. Ayer fui al gimnasio un ratito al medio día. Nada serio: un poco de HIIT en una elíptica y luego 4 superseries de dominadas asistidas (espalda) y flexiones en suelo (pectorales/abdominales). Sólo pretendía sudar un poco y volver a moverme. Para hoy, sin embargo, tengo reservado un entrenamiento distinto. Hoy voy a comenzar a realizar entrenamiento Tabata al mediodía, por lo que tres días a la semana mi entrenamiento se limitará a 4 minutos al día. He encontrado otra persona en el gimnasio dispuesta a probar conmigo y hoy comenzaremos nuestra rutina haciendo 4 minutos de sentadillas al estilo Tabata. Después, una ducha y de vuelta a la oficina, a tomar un batido de proteína para proteger los castigados cuádriceps. Con esta medida persigo estimular la quema de grasa y la generación de tejido muscular nuevo.
Adicionalmente, el resto de días que entrene voy a limitarme a hacer HIIT, ya sea en una elíptica, con pesas o con ejercicios de suelo. El objetivo es reforzar el Tabata con ejercicios de alta intensidad a intervalos. En cuanto a la comida, voy a ser muy estricto en no saltarme ninguna. Mi objetivo es hacer seis comidas cada día de unos 25 gramos de proteína y 15 gramos de grasa cada una. Con esto busco favorecer el desarrollo muscular al tiempo que estimulo la quema de grasa con los ejercicios que acabo de describir.
En la parte de las restricciones, también voy a ser muy riguroso con los carbohidratos simples y refinados, evitando cualquier alimento que tenga un índice glucémico superior a 40 o un aporte mayor de 5 o 6 gramos de carbohidratos por cada 100 gramos de producto. De este modo, no solo lograré adelgazar un poco más, sino que también fortaleceré mi salud contribuyendo al mantenimiento óptimo de mi sistema inmunitario. Además de este plan de comidas y entrenamiento, seguiré tomando mis 2 cápsulas de mutlivitamínico- multimineral y mi dosis nocturna de colágeno con ácido hialurónico para todo el tejido conjuntivo.
Por último, os dejo este enlace a un reportaje en el que participo que se emitió ayer en España Directo de La 1 en el que hablamos acerca de adelgazar con salud, contando experiencias y alejando a las personas de las pastillas milagro y las dietas sin sentido. Si has leído el libro ya sabes que no se trata de comer poco, sino de comer bien.