5 métodos para adelgazar que funcionan y no te explican

Soy consciente que se ha escrito mucho sobre los distintos métodos para adelgazar que pueden utilizarse para bajar de peso. Como es natural, muchos de estos métodos no tienen sentido alguno y se corresponden con modas o intereses comerciales. Otros te ayudan a perder peso, pero no te hacen adelgazar, o sea, reducen un poco tu masa grasa y por el contrario atacan directamente a la masa muscular. Hoy quiero dedicar unas líneas a hablar sobre algunos de los métodos para bajar de peso que debemos tener presentes mientras seguimos una dieta adelgazante, como la Isodieta que recomiendo en mi libro Adelgazar sin Milagros.

Todos estos métodos para adelgazar que voy a enumerar no funcionan de manera independiente, sino que son ayudas (coadyuvantes) en el control del peso corporal, así que nadie se imagine que por aferrarse a uno de ellos va a conseguir resultado alguno. Al contrario, lo que realmente produce resultados sorprendentes es tener estos métodos presente mientras seguimos un plan más ambicioso, como el que relato en mi libro.

1. Dormir bien ayuda a adelgazar

Existen numerosos estudios que relacionan directamente la falta de sueño con la obesidad. Aunque la lógica nos incite a pensar que cuanto más tiempo estemos despiertos más energía consumiremos y, por ende, con más velocidad adelgazaremos, la realidad es justo lo contrario. Una razón más para tirar el mito de la energía a la basura. No es suficiente con restringir calorías para adelgazar. Si se restringen demasiado las horas de sueño nuestro organismo no funciona correctamente y, en concreto, las hormonas que regulan el apetito y la necesidad de energía fallan, haciéndonos comer las cantidades erróneas de los distintos nutrientes. Para colmo, la resistencia a la insulina se ve afectada y la liberación de grasa al torrente resulta más complicada, por lo que en tendremos una desventaja en la lucha contra la grasa acumulada. Ten claro este método para perder peso: necesitas dormir adecuadamente. Cada persona tiene sus necesidades, pero por lo general entre 6 y 8 horas es adecuado para casi todo el mundo.

2. Beber agua ayuda a adelgazar

Esto es algo que ya explico en mi libro Adelgazar sin Milagros con cierto detalle. No se trata de que el agua tenga poder adelgazante alguno -esto es un mito-, sino que el consumo regular de agua nos ayudará a perder peso de diversas formas. Para empezar, beber agua antes y durante las comidas puede contribuir a la sensación de saciedad, por lo que se reducirá considerablemente la ansiedad por la comida. Además, beber agua de manera abundante (pero racional) contribuye a que eliminemos productos de desecho por la orina y, aunque parezca paradójico, nos ayuda a no retener agua. Para eliminar agua retenida como consecuencia de un desequilibrio entre el sodio y el potasio hay que eliminar el exceso de sodio y esto ocurre a mayor velocidad si bebemos abundante agua.

3. Comer grasa ayuda a adelgazar

Ahora es cuando a la mayoría de las personas se les abre la boca y luego suponen que me he escapado de un manicomio 🙂  Suena raro, ¿verdad?, pero lo cierto es que los estudios científicos apuntan a que una dieta pobre en grasa disminuye el metabolismo mientras que una dieta rica en grasa lo aumenta, y ello contribuye a la pérdida de peso. Dicho esto, no se trata de sentarse a beberse una botella de aceite de oliva ni de comerse dos kilos de bacon, sino de utilizar la grasa en la dieta de manera racional. La Isodieta recomienda la mitad de grasas que de proteínas para adelgazar rápidamente, y en mi experiencia se puede aumentar su consumo para mantener un peso estable. Lo más importante es escoger grasas saludables y, en este grupo, en mi opinión están todas las grasas naturales que no hayan sido hidrogenadas ni se hayan visto expuestas a factores que las alteren como la temperatura o la presión. De modo que apúntate este método para adelgazar que funciona perfectamente: haz que las grasas sean parte de tu dieta y evita los productos 0% grasa que suelen estar cargados de carbohidratos.

4. El ejercicio anaeróbico ayuda a adelgazar

Aunque lo común es que nos «receten» ejercicio aeróbico (cardiovascular) para adelgazar, lo cierto es que para adelgazar el ejercicio anaeróbico es mucho más eficaz. Todo apunta a que la quema de grasa durante y tras el entrenamiento es mucho más efectiva cuando se realiza ejercicio anaeróbico, en ausencia de oxígeno celular. Este tipo de ejercicio es el que se realiza con alta intensidad, alta concentración y a intervalos. Pueden ser pesas, sprints, calistenia, HIIT, Tabata o cualquier otro que te guste, pero lo importante es que sea un ejercicio muy intenso durante períodos muy breves de tiempo, que vayan seguidos de recuperación, y que se ejecuten en series, o sea, varias veces. Como he oído muchas veces a los expertos en el gimnasio: si puedes hacer más de ocho repeticiones, lo estás haciendo mal. Necesitas más intensidad y concentración, o sea, si son pesas por ejemplo, más peso. Si has leído mi libro La gran mentira de la nutrición, entonces sabes perfectamente de lo que hablo.

5. Evitar los edulcorantes ayuda a adelgazar

Este método para adelgazar es para nota, así que tenlo en cuenta. En realidad, se trata de evitar todos los sabores dulces y no solo los edulcorantes. No me voy a cansar de repetirlo: no se trata solo de calorías que entran y calorías que salen. Los estudios demuestran que en ciertas personas, los sabores dulces evitan que puedan adelgazar con naturalidad. Esto ocurre porque en estas personas el cerebro asocia el dulzor en las papilas gustativas de la lengua con la llegada inminente de azúcares simples al estómago y da la orden para que se segregue y libere insulina al torrente sanguíneo. ¿Recuerdas del libro lo que ocurre cuando hay insulina presente en grandes cantidades en la sangre? En efecto, que el tejido adiposo no libera la grasa y por ello es imposible adelgazar. Así que ten en cuenta que si eres una de esas personas cuyo cerebro ordena segregar insulina con los sabores dulces, tomar productos edulcorados, incluso si son acalóricos, no te permitirá adelgazar.

¿Qué os han parecido mis 5 métodos para adelgazar que funcionan y nadie os había contado antes?

Yo creo que usando estos métodos para adelgazar rápido como complemento a una dieta bien diseñada las opciones de adelgazar de manera saludable y permanente se incrementan exponencialmente. Como dije al principio, y como explico con más detalle en el libro, no se trata de hacer una cosa concreta para adelgazar, sino de usar el sentido común, aplicar lo que sabemos por la ciencia, y actuar de manera racional. No existe un método milagroso, ni una pastilla mágica para adelgazar. El conocimiento de nuestro cuerpo, de como reacciona el organismo con los distintos alimentos, es fundamental para poder controlar nuestro peso y nuestra salud. Usa estos métodos en combinación con mis tips para bajar de peso y los resultados no tardarán en llegar.